Bueno, ya que no tenemos en nuestras manos la nueva obra del autor, critiquemos
la antigua:
Guardo muy buenos recuerdos de la Isis dorada.
Desde siempre, me ha gustado leer y me bebía los libros cuando estos llegaban a mis manos, pero nunca me salía de los autores conocidos. Este libro inició mi veda hacia los autores noveles españoles que tanto tienen que decir en este mundillo. Así que digamos que la Isis dorada me abrió los ojos en ese sentido.
En un foro me crucé un par de veces un tal Jorge Magano, y tuve el placer de conocerle en una de esas quedadas foriles que se hacen de vez en cuando.
Tengo que admitir que la reseña me asustó. Tengo una pequeña fobia al género histórico, y… explicado de aquella manera, La Isis parecía asociarse a ese género. Así que lo abrí con cuidado y empecé a leerlo con escepticismo.
El prologo me relajó un poco. Sí, parecía histórico pero se leía con facilidad y te dejaba con ganas de saber más. Así llegué al primer capitulo. Y claro… mis ojos se abrieron como platos al ver el cambio tan radical que tomaba la historia del libro. Y desde la presentación de Jorge Azc.. digo.. Jaime Azcárate, hasta el final del libro, me tuvo enganchada, divertida y muy, muy entretenida.
De histórico nada de nada!!! Era muy actual, fresco y divertido. El humor irónico del protagonista provocaba carcajadas espontáneas, que me atragantara de la risa en determinadas situaciones o que me entraran ganas de zarandear a Jaime en otros momentos.
Una de las cualidades que tiene Jorge Magano como escritor, es la capacidad de darles vida a los personajes. Es como si los dibujase en su mente, y les diera con una varita mágica o algo así, y estos salieran andando por ellos mismos.
Con un par de trazos, les da personalidad, sentimientos, virtudes y defectos, creando la imagen con facilidad en la imaginación del lector.
Eso hace que te enganches pronto a la historia, dejándote con ganas de saber más de ese personaje secundario que dejó apartado mientras avanzabas por las páginas.
Estoy de acuerdo con ese pensamiento popular que corre por ahí, en que nunca sabremos si estamos hablando con Jorge Magano o con Jaime Azcárate. Si aquel que se cuela en casas ajenas, que corre de un lado a otro de Madrid, es el autor o el propio personaje, puesto que tienen muchas cosas en común, creo que incluso más de las que el propio autor piensa.
Los personajes son entrañables, logran atraparte y llevarte por unos lugares, que pareciendo normales y corrientes, se vuelven misteriosos y peligrosos por momentos. Nunca sabremos que se esconde en los sótanos del típico bar madrileño.
Con las Jornadas de Abretelibro, tuvimos la oportunidad de conocer los pequeños recovecos por donde Jaime se movía, el lugar donde vivía, por donde se desarrolla la acción y de comentar con el autor aquellas escenas que tanto nos llamaron la atención. Haciendo de la Isis un libro más cercano aun.
Así que para mi, La Isis dorada es un libro de misterio y acción, fresco, dinámico (sin apenas descanso entre la acción), divertido y entretenido.
Muy recomendable. Aunque sigo diciendo que no se merece esa reseña, que asusta a los lectores poco dado a la histórica, ea!!